La capital mundial del bisturí ya no solo llama la atención por su transformación urbana tras un pasado de violencia y narcotráfico. Ahora llama la atención por ofrecer a propios y visitantes cirugías plásticas a bajo costo solo para el día de las brujas.
Las cirugías hacen que el paciente adquiera facciones de cualquier tipo de espanto con un realismo imposible de lograr con maquillaje o disfraces.
«Los clientes vienen con un par de días de anticipación, se hacen la cirugía, los dejamos como brujas, frankensteins, chupacabras o vampiros, van a sus fiestas de Halloween y el 1 de noviembre vuelven para dejarlos como estaban antes», explica John Jairo Aristizábal, médico paisa, pionero en este tipo de procedimientos quirúrgicos «exprés».
El portafolio de la clínica del doctor Aristizábal también incluye implantes mamarios para disfraz de enfermera caliente, negociadora de paz caliente, madre comunitaria caliente, porrista caliente o colegiala caliente, todos tan tradicionales ya por estas fechas.
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