Lo que comenzó como una salida romántica a cine de un par de esposos terminó con la detención preventiva de un hombre por pegarle a su esposa.
Marcela Hernández* y su esposo, Rodrigo* asistieron al estreno de la anunciada película 50 sombras de Grey, inspirada en la novela erótica del mismo nombre, que narra el despertar sexual de una mujer joven, dirigida por un millonario aficionado al sadomasoquismo.
Marcela, quien ya había leído los tres tomos de la historia, invitó a su esposo con el fin de reavivar la apagada llama de su relación. “Le dije a Rodrigo que viéramos Los Pingüinos de Madagascar, pero yo ya tenía las boletas desde hace dos semanas. Nuestro matrimonio no pasaba por un buen momento y por eso pensé que la película podía ayudarnos, pero estaba muy equivocada”, contó entre lágrimas Marcela luego de practicarse exámenes de medicina legal que le dejaron una incapacidad de 7 días.
“Al principio mi esposo se excitó mucho en el cine, hasta me cogió la mano. Cuando volvíamos a la casa en taxi la cosa se fue poniendo más caliente, me besó y me intentó quitar la ropa, yo estaba muy contenta porque hace años que mi Rodri no se comportaba así. En la casa me aparecí con un babydoll y tangas que no había podido estrenar, se volvió un tigre…”, narró Marcela abriendo los ojos emocionada a pesar de los moretones.
La película muestra escenas explícitas de sexo y una amplia colección de juguetes sexuales con la que los protagonistas se amarran y fustigan en un ambiente de riesgo controlado. Una vez en casa, y a falta de la dotación adecuada, el esposo la emprendió a golpes con lo que encontró en el cuarto. “Como no tenemos esposas de peluche me amarró con un zuncho plástico, se quitó el cinturón y me empezó a dar una fuetera tenaz, yo le seguí la corriente porque pensé que era por la película, pero después se paró al baño y regresó con una chancleta mojada. Cuando me pegó con el cable de la plancha ya sospeché que estaba era como desquitándose conmigo”.
Por su parte, el abogado del marido reconoce que al hombre se le fue la mano y no supo llevar la situación con la elegancia del millonario ejecutivo Christian Grey, pero enfatiza en el trasfondo sociocultural de la situación: “No defiendo la violencia, pero no seamos doblemoralistas. Si un millonario le pega a la novia, es sadomasoquista, pero ay de que a un pobre asalariado le dé sus buenas nalgadas a la esposa, entonces es un abusador. La esposa tiene en parte la culpa, además le tenía cortados los servicios hace meses y eso es una bomba de tiempo”, aseveró.
Ante una demanda por lesiones personales y una solicitud de divorcio, el abogado argumentará en la defensa que su cliente sufrió un caso de lo que en Derecho se conoce como Testis Exaggeratus, o testosterona acumulada tras años de inactividad.
*Los nombres fueron cambiados para proteger su identidad.
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