La noticia que se conoce al tiempo con la eliminación de Colombia del Mundial Brasil 2014 ha sorprendido a propios y extraños. Todo apunta a que el exitoso estratega argentino fue convencido por su paisano, el papa Francisco, para que sea el encargado de echar a andar un ambicioso proyecto futbolero en la Santa Sede.
Según fue posible establecer, desde su llegada al solio de San Pedro el pontífice -que es fanático de San Lorenzo de Almagro- tuvo la idea de darle un espacio al fútbol entre su ambicioso programa de reformas. «Es un convencido de que que el Evangelio se puede comunicar de maneras que hasta ahora nadie había imaginado, entre ellas el deporte y si vamos a hablar de deporte, tiene que se el más popular del planeta», anotó una fuente.»Es además un mensaje ecuménico, dado que Néstor, como todos saben, es judío».
La idea es aprovechar la inmensa cantera que representan todos los seminarios, conventos y monasterios del planeta y para eso necesitaba de alguien con el perfil de Pekerman, durante muchos años director técnico de las selecciones juveniles de su país.
El objetivo es a largo plazo: clasificar al Mundial de 2030 que aspiran organizar de manera conjunta Argentina y Uruguay. Entre tanto, el trabajo del nuevo técnico tendrá el apoyo espiritual del Divino Niño, San Antonio de Padua y la Virgen de la Milagrosa en exclusividad, privilegio que le garantizó Francisco a Pekerman y razón de peso que lo terminó de convencer de firmar.
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