La idea de la Secretaría de Movilidad y Transmilenio es que el accesorio, que se le instalará a todos los buses duales-híbridos asignados a la emblemática vía, sirva para efectos de intimidación y eventual sanción por vías de hecho con «toco» suave a vehículos invasores.
«Por supuesto que uno no quiere llegar a estos extremos, pero a veces no queda más remedio. Ahora bien, se trata de una medida con un fin puramente pedagógico, la idea es que el bus le de a la máquina en situación automotriz que esté ubicada sobre el carril lo que hemos llamado el ‘toquecito picarón’ y que inmediatamente después un analista técnico de la Secretaría que irá en el bus se baje y le ponga unas orejas de burro», afirmó el funcionario de la Secretaría de Movilidad encargado de la campaña.
Pero la medida al parecer ha generado controversia en la administración distrital. Varios funcionarios de la Secretaría de Ambiente han elevado su voz de protesta por lo que consideran una «disposición que estigmatiza y victimiza a los individuos animáleos en situación aznar» además de «contener un peligroso subtexto que estímula el maltrato contra esta noble especie». Para protestar contra la medida, varios colectivos animalistas han organizado para este viernes una ingesta masiva de yagé con zanqueros, comparsas, mercado orgánico y presentación del individuo en situación aznar y de discapacidad, como en este ámbito se le conoce a Noel Petro.
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