Ana Lilia de Bermúdez, la famosa abuela que recibió su título de abogada la semana pasada, se ha convertido no sólo en ejemplo de superación sino también de constancia, toda vez que logró cancelar su deuda con el ICETEX el mismo día de su grado. Un lujo que muy pocos colombianos se pueden dar.
Ana Lilia adquirió su crédito con la institución crediticia el primer semestre de su carrera en 1952, a la edad de 17 años y 63 años después terminó de cancelar los intereses.
«La de Ana Lilia es una historia ejemplar. Luchó durante más de seis décadas con los intereses, pero al final ella ganó y canceló toda su deuda. Es una gran inspiración para nosotros sus compañeros de carrera, si ella pudo, nosotros ahora tenemos la esperanza de poder terminar nuestros estudios y cancelar las deudas en el 2078», manifestó William Vásquez, estudiante de octavo semestre y responsable de una deuda de 900 millones ante dicha entidad.
Tras obtener su grado, ahora Ana Lilia espera obtener un trabajo ejerciendo su profesión en el mismo bufete de abogados donde hizo sus prácticas profesionales hasta hace unos pocos meses.
«Ya tengo mi título, pero hay que empezar desde abajo. Si trabajo con empeño y constancia, algún día no muy lejano podré llegar a la Corte Constitucional. Como patinadora, por supuesto», dice entre risas mientras mira llena de esperanza el rojizo atardecer bogotano.
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